Gerardo Topete

MI HISTORIA

Desde que tenía 15 años comencé a soñar con la idea de tener mi propio restaurante.  Llegue a la conclusión de que si quería tener éxito en mi negocio tenia que aprender muy bien todas las facetas del negocio.

Comencé entonces a trabajar en todos los puestos disponibles en un restaurante.  Fui ayudante de mesero, mesero, capitán, ayudante de cocina, cocinero, bodeguero, barman, encargado de compras, incluso fui encargado de un negocio de pizzas.  Luego pensé que debía tener estudios para tener éxito.  Así es que busque la mejor escuela de cocina y administración de restaurantes que encontré y me fui a New York a estudiar.  De ahí decidí  tener experiencia en los mejores restaurantes, así es que me fui a trabajar a Barcelona en un prestigiado restaurante donde atendían a personalidades y presidentes.

Armado con toda esa experiencia y conocimiento regrese a México a entender los negocios locales y por fin, aproximadamente 12 años después de preparación, mi propio restaurante y servicio de banquetes estaba operando.  El negocio iba bien, de hecho muy bien.  Clientes importantes, eventos grandes que atender, el restaurante lleno, parecía que todo estaba perfecto hasta que “se salio de control”.  El trabajo se acumulo, tenia que dedicarle todo mi tiempo al negocio.

Sentía que no podía despegarme del negocio por que los encargados no iban a cuidar el negocio de la misma manera que yo lo hacia.  Si me iba de vacaciones estaba llamando constantemente a ver como iban la cosas y no podía (o no quería) ausentarme mas de una semana.  Comencé a pensar que las utilidades que me estaba dando no eran proporcionales al trabajo que estaba poniendo. Me llegue a preguntar si esto valía la pena.  Hasta que un día sucedió, los ingresos no eran suficientes, las circunstancias parecieron desfavorables y lo tuve que cerrar.

Me dedique entonces a entender que es lo que había sucedido.  Leí libros, tome cursos y al mismo tiempo me dedique a enseñar a alumnos de gastronomía lo que había aprendido tanto de cocina, como de administración y negocios, y descubrí así otra pasión en mi que es enseñar.

Como emprendedor me di cuenta que para tener éxito en mi negocio y en mi vida no era suficiente con tener conocimientos técnicos y de administración. Me di cuenta que tenía que aprender a manejar mis pensamientos, mis hábitos y mis deseos si realmente quería avanzar.
Al ir poniendo las piezas en su lugar comencé a ver mejoras en todas las áreas de mi vida. Primero mejoró mi salud (aún que no estaba enfermo). Después descubrí como usar mis conocimientos y el vehículo económico correcto para alcanzar mis sueños. Ahora me doy cuenta que mis sueños son mi limite.